El Secretario General manifestó este viernes su alarma por los acontecimientos en Guatemala, y los intentos del Ministerio Público de tomar medidas para anular las elecciones generales, las cuales fueron certificadas por el Tribunal Supremo Electoral el 29 de agosto.
Esto impediría que el presidente electo Bernardo Arévalo tome posesión de su cargo en enero de 2024.
António Guterres reiteró su llamado “al respeto de la voluntad de los votantes guatemaltecos y a una transferencia del poder sin contratiempos en enero”. Añadió que confía en que “se respetarán los resultados de las elecciones certificados por el Tribunal Supremo Electoral”.
El acoso judicial y la intimidación son inaceptables
Por su parte, el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos advirtió este sábado que los intentos persistentes y sistemáticos del Ministerio Público de Guatemala de socavar los resultados de las elecciones generales, es hacer caso omiso a la voluntad de los votantes.
«Los anuncios del viernes, que buscan anular el resultado de las elecciones generales y cuestionar la constitución y existencia del partido Movimiento Semilla, es extremadamente preocupante«, declaró Volker Türk.
El Alto Comisionado enfatizó que el acoso judicial y la intimidación contra funcionarios electorales y personas electas son inaceptables.
«Es alentador que, a pesar de la larga lista de acciones judiciales y políticas emprendidas por algunas autoridades, que claramente socavan la integridad del proceso electoral y vulneran el estado de derecho y la democracia, la población está defendiendo sus derechos y se opone a lo que percibe como un robo de su voluntad política», añadió.
El Alto Comisionado instó a las autoridades a preservar y respetar en todo momento todos los derechos humanos, incluyendo la libertad de expresión y la libertad de reunión pacífica.
«Una vez más, insto a las autoridades competentes, incluyendo al actual presidente, así como al poder judicial, a que actúen para preservar el estado de derecho y garantizar el respeto del resultado electoral y, por lo tanto, la voluntad de la mayoría del pueblo guatemalteco. Es fundamental salvaguardar la democracia y el respeto a los derechos humanos», finalizó.