AUTOR: Jesús Espinoza
En estos últimos días ha venido creciendo la presión de legisladores de
nuestra LX legislatura para darle sus últimos días al trámite del DUF. A tal
grado de que tienen pensado convocar a una reunión con empresarios,
académicos, desarrolladores inmobiliarios y expertos en el tema para
tomar una decisión consensuada de cancelación definitiva o de hacerle
modificaciones y actualizaciones. Habiendo sugerido algunos de los que
promueven esta iniciativa de cancelación, de que este trámite se les dé las
facultades a los 125 municipios para que se responsabilicen en llevarlo a
cabo. Propuesta que veo descabellada ya que primero se tendría que
asesorar a sus respectivas direcciones de obras públicas y a las de
desarrollo económico. No sin antes que estos directores sean primero
idóneos y certificados para dicho cargo en aprobación y autorización de
sus respectivos cabildos. Uno de los temas que no se han comentado, y
que para mí muy particular punto de vista es de gran importancia, es
clasificar a las unidades económicas en: mini, pequeñas, medianas y gran
industria. Para que de esta manera se analice el exentar a las minis y
pequeñas unidades económicas y sea el municipio correspondiente el que
las controle. No así a las medianas y grandes empresas, ya que por su
giro, ubicación y servicios requeridos tendrá que someterse a una
autorización de las autoridades municipales, estatales y federales y cumplir
con las factibilidades que marca en la actualidad la propia comisión estatal
de factibilidad. La cual desde mi particular punto de vista debe de ser
asesorada y apoyada por la propia Secretaría de Desarrollo Económico y
la de Desarrollo Urbano en mesas de trabajo y análisis de por lo menos
una cada semana, siendo indispensable la invitación a estas mesas de
trabajo al colegio de ingenieros del Estado de México y desde luego a un
representante de las distintas oficinas que participan en la autorización de
los respectivos DUF. En dichas mesas de trabajo también deberían estar
presentes los solicitantes de dicho trámite para que se les expongan el
análisis y las observaciones a los que han sido sometidos sus respectivos
trámites y cuáles han sido los puntos que no cumplen y en unos 40 días
hábiles se les brinde una respuesta.
