La era de la IA “gratuita” llega a su límite: OpenAI ya ha decidido quién pagará la factura
OpenAI ha comenzado a preparar el terreno para introducir publicidad en ChatGPT. El código de la última versión beta de su aplicación Android incluye referencias explícitas a anuncios de búsqueda, carruseles publicitarios y contenido comercial.
Es algo que se ve venir desde lejos y venía siendo rumoreado, pero hay una huella de la propia OpenAI.
Por qué es importante. La empresa no puede sostener indefinidamente el acceso gratuito a una tecnología carísima de operar. Google y Meta se pueden permitir algo así porque financian sus chatbots con enormes negocios publicitarios previos, pero OpenAI sigue acumulando deuda y quemando efectivo sin un modelo rentable claro.
Un usuario del plan Pro de 200 dólares mensuales ya ha reportado haber visto un anuncio de Peloton durante una conversación. La publicidad parece inevitable, quizás incluso para quienes pagan… a falta de saber si eso fue un error o parte de la próxima nueva normalidad.
Entre líneas. Sam Altman ha pasado de llamar a los anuncios «el último recurso» en 2024 a elogiar el modelo publicitario de Instagram meses después. Las previsiones internas filtradas anticipaban mil millones de dólares en «monetización de usuarios gratuitos» para 2026.
La empresa ha estado contratando personal especializado en plataformas publicitarias, sistemas de atribución y herramientas de campaña. El discurso ha cambiado: ahora habla de encontrar un formato que «beneficie al usuario».
Sí, pero. Reuters informa que OpenAI ha declarado el «código rojo» interno para mejorar ChatGPT (justo lo opuesto a lo ocurrido cuando llegó ChatGPT) y está posponiendo iniciativas como la publicidad. La prioridad ahora es responder al lanzamiento de Gemini 3, no monetizar a los usuarios gratuitos.
La ventaja oculta. Las IA conversacionales conocen a sus usuarios mejor que cualquier cookie o píxel de seguimiento web. Les contamos nuestras preocupaciones, intimidades e intereses sin filtros. Navegamos obsesionados con no ser rastreados, pero a ChatGPT le regalamos un perfil publicitario perfecto.
Google sabe qué buscas. ChatGPT sabe qué piensas. La diferencia determina el valor del anuncio.
En juego. OpenAI maneja 800 millones de usuarios semanales procesando 2.500 millones de consultas diarias. Esa audiencia bestial convierte cualquier modelo publicitario en miles de millones potenciales de ingresos anuales.
- El plan gratuito actual no desaparecerá, pero probablemente incluya anuncios.
- Los planes de pago podrían encarecerse cuando llegue la restructuración.
La empresa necesita ingresos que no dependan únicamente de suscripciones para cerrar su enorme déficit operativo.
Imagen destacada | Solen Feyissa







