PAN del Edoméx: Sin rumbo, sin oposición y sin agenda clara.

A pesar de ser la segunda fuerza histórica del país, en el Edoméx el PAN no muestra rumbo, estrategia ni liderazgo, mientras sus diputados parecen más concentrados en cumplir con la agenda mínima que exige el Congreso que en construir una oposición real
FIRR
Mientras el Partido Acción Nacional (PAN) atraviesa uno de sus momentos más erráticos en el Estado de México, su coordinador parlamentario, Pablo Fernández de Cevallos González, realizó una gira por las colonias Río Hondo, Alfredo V. Bonfil y La Mancha III, en Naucalpan, donde se reunió con apenas un puñado de vecinos que denunciaron la falta de atención por parte de la autoridad local. Sin embargo, este tipo de encuentros—limitados, sin estructura y sin un mensaje político claro—solo exhiben la desconexión profunda que vive el blanquiazul en la entidad.
A pesar de ser la segunda fuerza histórica del país, en el Edoméx el PAN no muestra rumbo, estrategia ni liderazgo, mientras sus diputados parecen más concentrados en cumplir con la agenda mínima que exige el Congreso que en construir una oposición real. Entre los propios panistas crece la percepción de que el partido ha perdido totalmente la brújula: no presenta iniciativas sólidas, carece de propuestas que conecten con la ciudadanía y continúa aferrado a una postura elitista que lo aleja cada vez más de los problemas cotidianos de la gente.
La visita de Fernández de Cevallos, lejos de fortalecer al partido, evidenció su desgaste. Una reunión con apenas unos cuantos pobladores difícilmente puede ser considerada un ejercicio serio de vinculación ciudadana, y mucho menos una estrategia para reposicionar al PAN frente al deterioro de su presencia territorial. La ciudadanía, cansada de la faramalla, espera una oposición efectiva, no actos simbólicos sin impacto.
En un contexto donde los municipios mexiquenses enfrentan problemas urgentes como inseguridad, deterioro de servicios públicos, opacidad administrativa y precarización social los panistas siguen sin ofrecer un horizonte alternativo. Pareciera que su única constante es cobrar puntualmente su sueldo, sin demostrar resultados, ni capacidad de articulación, ni voluntad de reconectar con la sociedad.
Con este vacío político, Acción Nacional llega a la antesala del próximo proceso electoral con una militancia desmotivada y una ciudadanía que simplemente ya no los considera opción. Si el PAN pretende volver a ser relevante en el Edoméx, deberá abandonar su zona de confort, dejar la imagen de partido “fifí” y construir una agenda real, firme y cercana a los mexiquenses; de lo contrario, seguirá esperando en vano que los votos le caigan del cielo.












