Gobernadora Delfina Gómez aumenta la tarifa del transporte público en el Edomex: de 12 a 14 pesos

El gobierno estatal argumentó que la actualización responde a la necesidad de equilibrar los costos y evitar una crisis en el sistema de transporte público. No obstante, advirtió que las empresas deberán mejorar la calidad del servicio, la seguridad y el estado de las unidades para conservar sus concesiones.
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Toluca, Méx. — La gobernadora Delfina Gómez Álvarez autorizó el incremento de la tarifa mínima del transporte público en el Estado de México, que pasará de 12 a 14 pesos a partir de este mes. La medida, solicitada desde hace tiempo por los concesionarios, busca compensar el aumento en los costos de operación, aunque ha generado preocupación entre los usuarios por su impacto económico.
De acuerdo con transportistas del Valle de Toluca, el ajuste era necesario ante el alza sostenida de los combustibles, refacciones, mantenimiento y seguros. “Llevábamos más de cinco años con la misma tarifa. Ya era insostenible mantener el servicio sin afectar la operación”, señaló un representante del sector.
El gobierno estatal argumentó que la actualización responde a la necesidad de equilibrar los costos y evitar una crisis en el sistema de transporte público. No obstante, advirtió que las empresas deberán mejorar la calidad del servicio, la seguridad y el estado de las unidades para conservar sus concesiones.
Impacto en la economía familiar; para los usuarios, el aumento representa un gasto adicional que afectará su presupuesto mensual. Una persona que realiza cuatro viajes diarios (ida y vuelta al trabajo) pasará de pagar 960 pesos mensuales con la tarifa anterior a 1,120 pesos, es decir, 160 pesos más.
En un contexto donde los salarios promedio en la entidad rondan los 8,000 pesos mensuales, el incremento puede significar una presión importante, sobre todo para trabajadores y estudiantes que dependen del transporte público todos los días.
Organizaciones ciudadanas calificaron el aumento como “un golpe al bolsillo”, ya que, aseguran, el servicio continúa siendo deficiente en diversas rutas: unidades viejas, tiempos de espera prolongados y falta de seguridad. “Suben la tarifa, pero seguimos viajando en las mismas condiciones”, comentó una usuaria en la terminal central de Toluca.
La Secretaría de Movilidad informó que con el nuevo ajuste se pretende modernizar el parque vehicular, fortalecer los mecanismos de supervisión y mejorar la capacitación de los operadores. También anunció que se revisarán los compromisos de servicio que cada concesionario deberá cumplir.
Los transportistas, por su parte, sostienen que el aumento permitirá invertir en mantenimiento y renovar parte del parque vehicular, que en muchos casos supera los diez años de antigüedad.
El impacto del alza varía según la región. En Toluca y los municipios conurbados como Metepec, Lerma y Zinacantepec, donde el transporte público es el principal medio de movilidad, el efecto será más notorio. En zonas rurales o alejadas, el aumento podría incentivar el uso de transporte informal o alternativo, como mototaxis o vehículos compartidos.
El incremento coloca a la administración de Delfina Gómez ante un reto social y político: equilibrar las finanzas del transporte sin deteriorar el poder adquisitivo de la población.
Analistas advierten que, si el alza no se traduce en mejoras visibles del servicio, podría aumentar el descontento ciudadano y la desconfianza hacia el sector. “El ajuste solo se justificará si los usuarios notan un cambio real en la calidad y la seguridad del transporte”, subrayan especialistas en movilidad urbana.
El aumento de la tarifa del transporte público en el Estado de México busca dar estabilidad al sistema, pero implica un reto doble: proteger la economía de los usuarios y garantizar que cada peso adicional se refleje en un servicio digno, eficiente y seguro para millones de mexiquenses que dependen de él todos los días.

