ESPACIO ELECTORAL
POR Eleazar Flores
RENOVACIÓN JUDICIAL, A MEDIAS
NUEVA SUPREMA CORTE-. A escasos cinco días de llegar la reestructuración de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, destacan dos hechos: la ASUNCIÓN del nuevo presidente Hugo Aguilar Ortiz y la REPETICIÓN de las ministras Lenia Batres Guadarrama, Yasmín Esquivel Mossa, principalmente.
En los hechos, las ministras citadas han demostrado no sólo simpatía por el ejecutivo federal en turno, antes Andrés Manuel López Obrador hoy Claudia Sheinbaum Pardo, sino actitudes de distanciamiento con la aún titular Norma Piña, como se evidenció en la ceremonia de despedida a mediados de semana, aplaudiendo a todos y SILENCIO para las repetidoras.
En cuanto al nuevo presidente Hugo Aguilar Castillo, su cercanía al ejecutivo federal anterior se evidencia al ser nombrado coordinador general del Instituto de Pueblos Indígenas, por el mismo Andrés Manuel López Obrador, con un desempeño evidente a favor de los grupos originarios con eficiencia y discreción, dicen sus allegados, lo que le evitó protestas al aspirar al nuevo cargo.
Con ciertos grados de discreción, se hacen los PREPARATIVOS OFICIALES de la transición y los infaltables RITUALES que califican como TRADICIONALES, en los que destacarán, -con posibles cambios de última hora-, la eliminación de las TOGAS en la misma sede de la Suprema Corte y la PURIFICACIÓN, que de confirmarse, se hará a primera hora del primero de septiembre.
De concretarse esta ceremonia, se haría en las cercanías del centro ceremonial CUICUILCO, -cerca de donde vivió López Obrador-, donde se presume que a Hugo Aguilar Ortiz se le entregará el infaltable BASTÓN DE MANDO, pero seguramente no será la presidenta saliente Norma Piña quien asuma esa responsabilidad, por lo que esta incógnita prevalece.
De raíces originarias oaxaqueñas, seguramente el nuevo presidente de la Suprema Corte Hugo Aguilar Ortiz podría acceder a participar en dichos ritos, máxime que se prevé la participación de algunos grupos étnicos, incluso como organizadores de dicha ceremonia, programada extraoficialmente para las cinco de la mañana del primero de septiembre.
LO OFICIAL-. Lo que sí se llevará a cabo en forma oficial y protocolaria, será la ceremonia de transición en el domicilio de la SUPREMA CORTE, en Pino Suárez número 2, en pleno centro histórico, previa LIMPIA que dicen se hace al recinto; y por la noche, acudir a las instalaciones del SENADO de la república, para rendir protesta los nuevos integrantes del Poder Judicial.
Como remembranza, se registra el último cambio de la Corte, que en el sexenio del presidente Ernesto Zedillo se redujo de 26 a 11 ministros, misma cantidad que sigue, con la PEQUEÑA DIFERENCIA de que en esta renovación se COLARON algunos con menos de 8.5 de calificación.
Sólo faltó que para quienes no llegaron se les dijera que fue por alcanzar el DIEZ de promedio.
