Esta moto parece una Vespa, el motor ruge como un tractor y el cambio es de una moto de nieve. Es rusa, claro
Una de las subculturas más fascinantes es la del ‘Dieselpunk’. Se trata de una visión retrofuturista del periodo entre la Primera y Segunda Guerra Mundial que tiene el motor de combustión en el centro de toda su tecnología. Películas como ‘Sky Captain y el mundo del mañana’ recrean la estética a la perfección. En videojuegos, podríamos hablar de ‘Wolfenstein The New Order’. Y, en la vida real, hay quien se ha empeñado en crear una scooter dieselpunk que suena como un tractor y fusila el diseño de la Vespa, pero con influencias soviéticas.
Y su creador es ruso, cómo no.
Scooter Dieselpunk. La creación de vehículos caseros es todo un arte. Por un lado, tenemos los llamados ‘restomods’. Se trata de proyectos que permiten tener un coche clásico por fuera, pero con mecánica y electrónica actual. Uno de los coches más utilizados en estas ‘mezclas’ es el Tesla Model 3, que permite dar vida a modelos como este precioso Mercedes-Benz 300SL. Por otro lado, tenemos a los que tiran de inventiva para crear algo nuevo.
Rusia es prolífica en esta labor, siendo este Lada Vaz-2101 con un motor V16 a base de motosierras un ejemplo. Pero también la ‘Scooter Dieselpunk’ que corona este artículo y que es obra del taller Saint Peter’s Builds. Son unos entusiastas que modifican vehículos en proyectos artesanales y suben su trabajo a redes. Uno de ellos fue esta Honda Super Cub, pero con la Dieselpunk prometen superarse.
Motor soviético. El corazón de la moto es un motor diésel V4 de 1.200 cc sacado de un ZAZ 968. Este fue un coche compacto que tenía la intención de convertirse en el “coche del pueblo”, como Volkswagen, pero en la Unión Soviética. El motor se ubicaba en la parte trasera, consiguiendo un peculiar reparto de pesos y, con una potencia de 50 CV, es el elegido para la Dieselpunk.
La caja original era de cuatro marchas, pero para facilitar las cosas en la moto, desde Saint Peter’s Builds han decidido ir más lejos con el Monstruo de Frankenstein: un sistema CVT (o cambio de transmisión variable continua) que emplea un sistema de poleas en lugar de engranajes y que han sacado de una moto de nieve. Para conectar el cambio al motor, han utilizado combinaciones de ejes y cadenas.
Lo más increíble es que, tras algunas pruebas fallidas, el motor ya ronronea. Bueno, “ronronea” por decir algo, ya que suena como un tractor:
Vespa retrofuturista. El motor es la pieza más complicada de este vehículo, pero aunque es un logro que funcione como quieren, queda mucho camino por delante. En el vídeo podemos ver el diseño, que es mitad Vespa de la trasera al manillar, mitad tractor en toda la parte frontal. El motor asoma por los laterales, con los cilindros asomando en pareja por los laterales y un escape artesanal.
Es ese morro alargado, los cilindros del motor actuando como aletas y, sobre todo, las líneas decorativas por todo el lateral lo que le da a la moto ese aire retrofuturista, como recién sacada de ‘Fallout’.


Ansiosos por el futuro. De momento, como sus creadores afirman, los primeros pasos ya se han dado y habrá que estar atentos a ver cómo modelan el exterior, sobre qué chasis montan todo y, sobre todo, si algún día conseguirán terminar el proyecto para deleitarnos con otro vídeo en el que los veamos dar una vuelta.
Lo que parece evidente es que esa colocación frontal del motor y, sobre todo, el morro, implicarán un reparto de masas complejo que afectará tanto a la estabilidad como al paso por curva. Pero bueno, lo último que habría que esperar es ver esto en carretera en el día a día. Aunque quién sabe, es Rusia…