Elon Musk ha conseguido todo lo que quería: un bono de un billón de dólares y poder absoluto sobre Tesla
Era el último paso que separaba a Elon Musk de conseguir el bono salarial más grande de la historia empresarial de EEUU. La junta de accionistas de Tesla ha dado un apoyo mayoritario a su CEO que, de conseguirlo, se convertiría en el primer billonario del mundo. «Las demás juntas de accionistas son aburridas, pero las nuestras son una pasada», aseguró un exultante Musk sobre el escenario frente a algunos de sus accionistas.
El plan de Tesla, valorado en cerca de un billón de dólares, se basa en el desbloqueo progresivo de pagos en forma de paquetes de acciones y está condicionado a que Musk cumpla una serie de objetivos muy ambiciosos relacionados con el crecimiento y desarrollo tecnológico de la compañía durante la próxima década, dando a Musk un férreo control sobre las decisiones que toma la compañía.
Aprobado y con nota. Con el respaldo del 75% de los accionistas, Tesla ha aprobado un plan que podría otorgar a Elon Musk hasta 423,7 millones de acciones en la empresa durante los próximos diez años. La valoración estimada de estas acciones supera el billón de dólares, una cifra que, aunque extremadamente elevada, depende estrictamente de que se cumplan ciertos objetivos muy específicos y exigentes.
Cabe decir que no ha sido una negociación sencilla, ya que Musk ha tenido enfrente a importantes accionistas como el fondo soberano de Noruega, que controla un participación de 11.700 millones, se manifestó en contra de los planes de remuneración del CEO de Tesla aclarando que «si bien apreciamos el importante valor creado bajo el papel visionario del Sr. Musk, nos preocupa el tamaño total del premio».
Como contrapunto, decir que Musk controla aproximadamente el 15% de las acciones de Tesla y, como cualquier otro accionista, también podía votar a favor de su plan de remuneración. «Lo que estamos a punto de emprender no es simplemente un nuevo capítulo del futuro de Tesla, sino un libro completamente nuevo», dijo Musk a una entregada audiencia de accionistas durante el acto de la votación.
1 billón, pero con condiciones. Para recibir el total de la remuneración, Elon Musk debe cumplir distintos hitos progresivos que irán desbloqueando 12 paquetes de acciones que solo podrá hacer efectivas al cabo de siete años, lo cual no solo garantiza mantener a Musk motivado con incentivos económicos, sino que también son unas esposas doradas para mantenerlo como CEO de la compañía para la próxima década.
El paquete de acciones proporcionara a Musk el control del 25% de las acciones de Tesla, lo cual implica que este paquete de acciones no solo va de una compensación económica (muy generosa, eso sí), sino que va de conseguir más peso en la compañía y que Musk pueda imponer su criterio frente a la junta directiva. Algo que venía reclamando desde hace tiempo para evitar que le hicieran «un Altman».
Hitos complicados. Entre los hitos que Musk debe alcanzar para recibir el paquete completo se incluyen: elevar la capitalización de mercado de Tesla desde los 1,5 billones actuales hasta los 8,5 billones de dólares. Esta primera condición es una de las que más ha convencido a la popular inversora Cathie Wood, que escribía desde su perfil de X: «No entiendo por qué los inversores votan en contra del paquete salarial de Elon cuando ellos y sus clientes se beneficiarían enormemente si él y su increíble equipo alcanzaran objetivos tan ambiciosos», subrayando el hecho de que, si Tesla multiplica por seis su capitalización, también lo haría el precio de sus acciones, que deberán revalorizarse un 466% con respecto a su precio actual.
Además, Tesla deberá fabricar y entregar 20 millones de vehículos, justo en un momento en el que las ventas de Tesla en Europa y otros mercados registran sus peores cifras. Por ponerlo en contexto, Tesla ha vendido 55 unidades de su Model 3 en España durante el pasado mes de octubre. No lo va a tener fácil.
Futuro autónomo. Otro de los grandes retos a los que se va a enfrentar Musk para conseguir su bono billonario, y uno de los principales motivos por el que Musk quería más control dentro de Tesla, son los planes de futuro para el coche autónomo y los robots humanoides de la compañía.
Para desbloquear parte de su paquete salarial Tesla deberá desplegar un millón de taxis autónomos, alcanzar diez millones de suscripciones a sus coches con conducción autónoma y vender un millón de robots humanoides. Ninguna de esos tres proyectos es 100% funcional en la actualidad y solo hay prototipos y pruebas parciales. «Creo que va a ser el producto más grande de todos los tiempos, por mucho. Más grande que los teléfonos celulares, más grande que cualquier cosa. Supongo que una forma de pensarlo es que cada ser humano en la Tierra va a querer tener su propio R2D2 o C3PO», aseguró el CEO de Tesla en su discurso ante sus accionistas.
Tal vez el detalle menos comentado es que, con esta aprobación, Tesla da luz verde a las inversiones en xAI, por lo que Musk ya habría conseguido uno de sus objetivos: conseguir un línea de financiación constante que incremente el valor de su empresa de IA.
Si no lo consigue no cobra. El plan de remuneración no contempla un salario fijo tradicional para Elon Musk durante la próxima década. Toda su compensación estará ligada a la consecución de los objetivos marcados.
Además, Musk tendría que permanecer como CEO al menos diez años para cobrar el paquete en su totalidad. Esta parte ha sido una de las más comentadas, ya que otorga a Musk un papel casi mesiánico al frente de Tesla en el que o se lleva todo el premio o lleva a Tesla al fracaso absoluto. «Esto no es pago por desempeño. Es pago por poder sin control», dijo a The New York Times Thomas DiNapoli, responsable del fondo de pensiones públicos de Nueva York, que controla parte de las acciones de Tesla.
Cabe recordar que, en la actualidad, Musk recibe un salario simbólico de un dólar al año por dirigir la compañía.
Imagen | Flickr (Gage Skidmore)
