Microsoft está matando a Xbox por un Excel

Microsoft ha impuesto a su división de Xbox un objetivo de márgenes de beneficio del 30%, una cifra muy superior a la media que se suele obtener en la industria del videojuego, según revela Bloomberg. Esta directriz explicaría muchas de las polémicas decisiones que ha tomado Xbox en los últimos años, sobre todo en lo que a cancelaciones de proyectos, despidos masivos y subidas de precio se refiere.
Un objetivo a leguas. El margen de beneficio medio en la industria del videojuego ha oscilado entre el 17% y el 22% en los últimos años, según comparte Jason Schreier en su artículo, basándose en estimaciones de S&P Global Market Intelligence. Tal y como afirma el periodista, en Xbox, esa cifra se situaba entre el 10% y el 20% durante los últimos seis años. Por otra parte, documentos judiciales de 2023 revelaron que el negocio de gaming de Microsoft tenía un margen del 12% en los primeros nueve meses del año fiscal 2022.
Neil Barbour, analista de S&P Global, afirma que «un margen del 30% o superior suele estar reservado para una compañía que realmente lo está clavando». Por poner un ejemplo, véase ahora mismo Capcom, que se encuentra prácticamente en su época dorada y que en informes recientes se veían márgenes de operación que rozan el 40%.
Quién está detrás del cambio. Según cuenta Schreier, este objetivo fue implementado en otoño de 2023 por Amy Hood, directora financiera de Microsoft, cuyo equipo ha asumido un papel mucho más relevante en el negocio del gaming en los últimos años. Según fuentes citadas por Bloomberg, anteriormente los desarrolladores de Xbox no tenían que cumplir objetivos numéricos específicos y se les pedía que se centrasen en hacer los mejores juegos posibles sin preocuparse demasiado por las finanzas.
Las consecuencias prácticas. Para alcanzar ese margen, Xbox ha tenido que tomar medidas drásticas. En 2024 anunció que lanzaría la mayoría de sus juegos en consolas de Nintendo y Sony por primera vez. En julio descubrimos que canceló varios proyectos costosos que llevaban más de siete años en desarrollo, como Everwild, Perfect Dark o Project Blackbird. También ha despedido a miles de empleados y ha subido los precios de Game Pass y de las consolas. Por subir, hasta han incrementado el precio de sus kits de desarrollo. Según las fuentes del informe, de cara al futuro se priorizarán juegos baratos de producir o con grandes expectativas de ingresos frente a apuestas más arriesgadas.
El dilema de Game Pass. La estrategia de incluir todos los juegos de Xbox en Game Pass el día de su lanzamiento ha perjudicado las ventas directas de juegos, según apuntan las fuentes de Schreier. Y es que tal y como comparte el medio, para compensar estas pérdidas, Xbox ofrece a sus desarrolladores un crédito calculado mediante una fórmula opaca que parece favorecer a los juegos en los que los jugadores pasan más horas, como los títulos multijugador online. Esto dificulta aún más alcanzar ese margen del 30%.
La próxima apuesta de hardware. Sarah Bond, presidenta de Xbox, ha declarado recientemente a Mashable que la próxima consola de la compañía será «una experiencia muy premium, de muy alta gama y cuidada», lo que sugiere un cambio de estrategia respecto a generaciones anteriores y, previsiblemente, un precio significativamente más alto. Ya hay voces que apuntan a una consola mucho más parecida a un PC, un concepto similar a lo que hemos visto con la ROG Xbox Ally. No obstante, aún no hay información oficial, por lo que tendremos que esperar para conocer más detalles.
La respuesta oficial. Un portavoz de Xbox ha declarado que la compañía «tiene una visión a largo plazo» de su negocio y que el éxito «no se ve igual en cada proyecto o prioridad». Añadió que evalúan «el negocio en su conjunto, equilibrando creatividad, innovación y sostenibilidad en una cartera diversa de ofertas». Tal y como cuenta Bloomberg, en julio, Amy Hood aseguró en una llamada con inversores que los ingresos operativos de la división de Xbox habían crecido un 34% en el trimestre que terminó en junio gracias a «la priorización continua de oportunidades de mayor margen».
Decisiones. Xbox lleva años perdiendo cuota de mercado frente a PlayStation y Nintendo. Microsoft ya no revela las ventas de hardware de Xbox, pero los analistas estiman que PlayStation 5 ha vendido más del doble de unidades que Xbox Series X. Para reforzar su catálogo de juegos, Microsoft ha adquirido más de una docena de compañías en los últimos años, incluyendo la compra de Activision Blizzard por 69.000 millones de dólares en 2023, la mayor adquisición de la historia del gaming. Sin embargo, parece que para Microsoft no es suficiente, y todo indica que la empresa estará mucho más pendiente de su división de gaming que nunca, un forcejeo entre ejecutivos y altos responsables que nadie sabe a dónde va a parar.





