Pendientes en el Segundo Informe de Delfina Gómez: ¿Transformación a Medias?

Por: El Husmeador
Toluca, Edomex., 22 de septiembre de 2025. Hoy, en el Teatro Morelos, la gobernadora Delfina Gómez Álvarez rindió su Segundo Informe de Gobierno ante un auditorio abarrotado de simpatizantes, autoridades federales y locales, y hasta el legendario Julio César Chávez como invitado estelar. Con el emblema de la Cuarta Transformación ondeando en cada slide de PowerPoint, Delfina –como la llaman sus cercanos– repasó logros que suenan a victoria: más de 13 mil millones de pesos en programas sociales que beneficiaron a un millón de mexiquenses, una derrama económica de 9 mil millones gracias a ocho millones de turistas, y un Guinness por recolectar 600 toneladas de basura en jornadas comunitarias. Avances en reforestación (3 mil hectáreas), transporte público con trolebuses y Mexicables eléctricos, y una supuesta reducción en la pobreza que, según ella, se mide en empleos formales y menos hambre en las mesas. Pero, como en toda rendición de cuentas digna de este nombre, el informe no fue solo un desfile de cifras rosadas. Delfina se autoevalúa con un honesto «8» en su calificación, reconociendo que el camino hacia la transformación es un maratón, no un sprint. Y ahí radica el meollo: los temas pendientes que, lejos de ser meros detalles, son las grietas en el muro de la esperanza que prometió la 4T en el Estado de México, el territorio más poblado y problemático del país. En sus palabras, durante los encuentros regionales que arrancan mañana en Temascaltepec, Atlacomulco y Texcoco, se hablará de «avances y pendientes». ¿Cuáles son esos pendientes que claman por acción inmediata? Vamos por partes, con la crudeza que merece un estado que sigue sangrando por sus heridas crónicas. Primero, la seguridad, ese elefante en la habitación que nadie quiere mirar de frente. Delfina presume operativos y patrullas entregadas, pero las cifras oficiales y las voces de la calle cuentan otra historia. En el último año, el Edomex registró un repunte en homicidios dolosos en zonas conurbadas como Ecatepec y Nezahualcóyotl, donde el crimen organizado sigue cobrando cuotas a transportistas y comerciantes. La gobernadora admitió que se necesita «fortalecer aún más la estrategia», pero ¿con qué? ¿Más discursos o recursos reales? La oposición, desde el PAN hasta el PRI, ya afila los dientes en el Congreso para la glosa del informe, donde secretarios como el de Seguridad tendrán que explicar por qué el «abrazos, no balazos» no ha bajado la tasa de impunidad que ronda el 95%. En X, usuarios como @MexiquenseTV ya lo señalan: «retos pendientes» en un estado donde la violencia es el pan de cada día. Segundo, la salud, un pendiente que duele en carne viva. Sí, Delfina habla de medicamentos llegando a clínicas y hospitales, pero alcaldesas como la de San Mateo Atenco claman que los centros de salud «siguen sin abasto». Imagínense: un millón de beneficiarios de programas sociales, pero ¿cuántos esperan horas en filas para un analgésico? El desabasto crónico, heredado de administraciones pasadas, no se resuelve con promesas; requiere inversión en infraestructura y personal. En su autoevaluación, la mandataria lo puso en la mira, pero las reacciones post-informe en redes y medios locales insisten: «reforcemos la salud en los municipios». Con la pandemia aún fresca en la memoria colectiva, este pendiente no es solo administrativo; es una traición a la equidad que tanto se pregona. Tercero, la movilidad, ese caos vial que convierte el Valle de México en un estacionamiento gigante. Avances como la Línea 3 del Mexicable y unidades eléctricas suenan bien en el papel, pero Delfina misma lo dijo: pendientes en baches y carreteras que necesitan reencarpetamiento. El Edomex, con su conurbación al DF, pierde miles de horas productivas en tráfico; los apoyos a municipios son bienvenidos, pero insuficientes. ¿Y el transporte rural? En regiones como Temascaltepec, donde mañana arranca el diálogo regional, las comunidades indígenas esperan no solo palabras, sino rutas seguras y accesibles. Críticas en la glosa legislativa ya apuntan aquí: ¿dónde están los recursos para que el «gobierno de territorio» no se quede en retórica? Y no olvidemos temas transversales como la atención a comunidades originarias, que emergen en las reacciones ciudadanas como un grito ahogado. Mientras Delfina celebra jardines agroecológicos en la Reserva de la Mariposa Monarca, las voces de pueblos mazahuas y otomíes piden inclusión real en presupuestos y políticas. La pobreza multidimensional, aunque reducida según el informe, sigue azotando al 40% de la población; primero los pobres, sí, pero ¿todos? En resumen, el Segundo Informe de Delfina Gómez es un espejo agridulce: refleja avances históricos para una mujer al frente de la entidad más compleja del país, pero también ilumina sombras que no se disipan con aplausos. Con cuatro años por delante, la gobernadora tiene la oportunidad de convertir pendientes en prioridades. Los regionales de esta semana serán un termómetro: ¿escuchará el pulso del pueblo o se conformará con el eco de sus aliados? En el Edomex, donde la política es un ring de boxeo eterno, Delfina sabe que ganar rounds no basta; hay que noquear los problemas. De lo contrario, el 2027 podría ser un nocaut para la 4T.
