Cantabria quiere más visitantes en el parque de Cabárceno. Así que creará un gran tobogán alpino para viajar a 40 km/h
El Parque de Cabárceno, en Cantabria, es famoso por sus reservas de animales y haber alcanzado un curioso hito mundial: convertirse en un referente en la cría en cautividad de elefantes africanos. Ahora sus responsables quieren que el recinto sea conocido por algo más, un espectacular tobogán alpino de 1,2 kilómetros en el que se alcanzarán velocidades de 40 km/h. De momento solo tenemos los planos incluidos en su informe técnico, pero son suficiente para ir abriendo el apetito.
¿Cuál es su objetivo? Que el parque resulte más atractivo y capte más visitantes.
Dos palabras: tobogán alpino. El Parque de Cabárceno, un espacio a medio camino entre el zoológico tradicional y un recinto para safaris enclavado en plena comarca santanderina, quiere volverse más atractivo. Y quiere hacerlo a lo grande, con una reclamo pensado para los más aventureros: un tobogán alpino.
También conocidos como «alpine coaster», los toboganes alpinos son ni más ni menos que circuitos de raíles diseñados para que los visitantes puedan deslizarse por ellos a bordo de trineos aprovechando el desnivel de las montañas. En Andorra tienen uno muy popular: el Tobotronc, con un trazado de más de cinco kilómetros.
Viajes a 40 km/h. El tobogán alpino que quiere construir Cantabria quizás no alcance el tamaño de Tobotronc o el de Mieders, en Austria, donde han construido otra estructura similar de casi tres kilómetros y un desnivel de 640 metros, pero será igualmente fascinante. Según ha revelado el Gobierno autonómico, medirá 1,2 km (330 m de subida y 854 de descenso) y quienes se suban a él podrán alcanzar los 40 km/h, aunque serán los propios usuarios quienes regulen la marcha.
Trineos y rizos de 360 grados. No son los únicos datos que han trascendido del proyecto, impulsado por la empresa pública Cantur. El Gobierno de Cantabria ha revelado que la infraestructura contará con 25 trineos con capacidad para dos personas que salvarán un desnivel de 75 m y avanzarán en un recorrido en zigzag, con curvas y dos loopings de 360º. Tampoco hace falta imaginárselo. El Ejecutivo ha publicado el proyecto básico, en el que figura su futuro trazado.
¿Otoño de 2025? El proyecto en sí no es nuevo. En octubre el consejero de Turismo, Cultura y Deporte de la región, Luis Martínez Abad, ya habló de él en el Parlamento, donde desgranó algunas características del futuro tobogán. Según precisó entonces, la inversión para sacar adelante la estructura alcanzaría los 1,5 millones de euros y la idea era que estuviese operativo ya en el otoño de 2025.
El Diario Montañés revela ahora que en el documento técnico se apunta en realidad a una inversión de tres millones de euros, IVA incluido. También parece difícil que la estructura esté lista antes de 2026. Eso no significa que la iniciativa esté parada. Al contrario. Si ha sido noticia estos días es porque el Gobierno de Cantabria acaba de sacar a información pública el proyecto de construcción.
Durante los próximos días cualquier persona interesada en el proyecto podrá consultar en la web de la Dirección General de Urbanismo los planos y cálculos del futuro tobogán y, en caso de que lo crea necesario, presentar alegaciones.
Vista aérea de la zona en la que se instalará el «Alpine Coaster».
Objetivo: diversificar. En octubre, durante su intervención en el Pleno del Parlamento, Martínez Abad reivindicó que el futuro tobogán alpino «no es un capricho, sino una oportunidad». Ahora el Gobierno insiste en la misma idea: su propósito es reforzar el atractivo del parque para que lo visite más gente a lo largo del año. «El objetivo de esta infraestructura es ampliar y diversificar la oferta de Cabárceno y dotar al parque de más atractivos que permitan atraer nuevos públicos y desestacionalizar», razona el consejero de Turismo.
En 2023 el recinto recibió más de 650.000 visitantes, pero esa cifra oculta en realidad dos grandes desafíos. El primero es que la mayoría de esas visitas se concentraron durante una época muy concreta del año, entre Semana Santa y los meses de verano. El segundo reto es que al recinto le cuesta despertar el interés de la población más joven. La idea, recalca el Gobierno cántabro, es atraer a la gente de entre 14 y 24 años, la que «menos interés muestra» ahora por el parque.
Guiño al pasado minero. El tobogán se situará en una zona próxima a la entrada norte de Obregón, «en un terreno no aprovechado de la instalación», aclara el Ejecutivo regional, que recuerda que al planificar el trazado se ha buscado una parte del parque alejada de los animales (en Cabárceno viven cebras, camellos o elefantes, entre otras muchas especies), con arbolado y una pendiente adecuada. Los técnicos han querido también lanzar un guiño al pasado minero de la región.
«El proyecto se desarrolla en un entorno único de las inmediaciones del Bien de Interés Local de las antiguas instalaciones de la mina de hierra de Cabárceno, por lo que contempla integrar la infraestructura necesaria en el entorno paisajístico, utilizando acero corten, madera tratada o cristal para ofrecer un aspecto exterior similar a las instalaciones mineras», aclara. Entre otras cosas, quienes se suban a los trineos podrán contemplarse los vestigios mineros de Cabárceno.
Imágenes | Gobierno de Cantabria, Jeremy Thompson (Flickr) y Tuscasasrurales (Flickr)
