Opinión

P A N O R A M A S


¿Qué es lo que buscaba, quería o quiere la oposición en México antes y después de ser aprobada la reforma al poder judicial?

«Es absurdo que la verdad genere tantos enemigos y la mentira tantos seguidores»
— Alexander Gue Giraldo

En resumen, la «oposición» en nuestro país quería, quiere y seguirá queriendo la desestabilización en todos sus ámbitos, si los partidos políticos que la representan (PRI, PAN, MC) están presentes, como solía pasar en los muchos años que el PRI y el PAN gobernaron México. Durante sus sexenios, mostraron al pueblo de nuestro país ante el mundo una gobernanza plagada de estrategias que favorecían, primero, los intereses particulares de grupos o de capitales extranjeros.

Ya lo he comentado en columnas pasadas: se llevaron a cabo convenios o acuerdos entre países, grupos políticos o personas para saquear a México en todos sus aspectos: económicos, políticos y sociales.

Hoy en día, con el aparato mediático del que actualmente dispone la llamada «oposición», se observa un alejamiento cada día mayor de los partidarios del PRI y PAN. Además, con la estocada que le dio el IEM al famoso delincuente «Alito Moreno» para revocarlo del cargo que él y su camarilla «planificaron» para seguir siendo presidente del PRI. En lo que respecta a Marco Cortez, presidente del PAN, casi todos los integrantes y dirigentes de este partido exigen su inmediata salida.

No podemos olvidar cómo se retiró el registro al PRD, debido a su baja aceptación a nivel nacional, por medio del IEM, resultando ya liquidado. Sin embargo, en algunos estados, sus diputados resultaron ganadores y ejercerán sus respectivos cargos en las cámaras de diputados ¡sin contar con el respaldo de su partido!

Como ya se conoce, personajes como la senadora Lily Téllez y otros emplean su curul para atacar a sus adversarios la mayoría de las veces. Estos personajes, que ni en sus propios estados natales son queridos, deberían desaparecer para dar lugar a personas que sumen al bienestar general en los altos poderes legislativos, en lugar de emplear estos espacios para tratar rencillas personales.

La Reforma al Poder Judicial

Volviendo al tema de la ya autorizada y publicada reforma al Poder Judicial en el Diario Oficial de la Federación (DOF) el pasado domingo 15, hacemos mención de los «famosos fideicomisos» que ocultamente manejaban.

Aunque la Cámara de Diputados determinó su extinción, los ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) conservan sus fideicomisos, en los que «guardan» alrededor de $6,985 millones de pesos. A esto se suman otros fideicomisos ocultos por conveniencia, como uno que asciende a $9,765 millones de pesos. Además, mantienen otros cuatro fideicomisos, por un total de $17,706 millones de pesos, que el Tribunal Electoral también gestiona.

Estos fideicomisos, que administran dinero público, debían haber desaparecido en octubre de 2023. Sin embargo, los ministros y trabajadores del Poder Judicial de la Federación (PJF) se aferran a ellos. Estos recursos multimillonarios deberían ser devueltos a la Tesorería de la Federación, pero el PJF lo evitó mediante amparos.

El manejo de esos fideicomisos es discrecional, como lo revelan los resultados de la auditoría elaborada en el primer semestre de este año por el Órgano Interno de Control de la SCJN. En ella se apunta que el fideicomiso para las pensiones complementarias carece de mecanismos para otorgar, autorizar y pagar ese beneficio. En el caso del fideicomiso 80689 «Manejo del Producto de Ventas y Publicaciones y otros Proyectos», se reporta una erogación de $186 millones de pesos en 2023.

Otro caso es el fideicomiso 80691 «Pensiones Complementarias M.S» y 80690 «Pensiones Complementarias M.M y P.O», donde la auditoría interna señala que la Dirección General de Tesorería de la SCJN, encabezada por la ministra presidenta Norma Piña, carece de un procedimiento formal que describa las actividades para el otorgamiento y pago de pensiones complementarias.

El fideicomiso más empleado por la Corte es el 80698, y parece que la SCJN busca conservar para su beneficio estos millonarios fideicomisos, como si fuera una empresa dedicada a hacer negocios para el beneficio de sus empleados y familiares. Se está convirtiendo en una fiscalía judicial para defender y liberar delincuentes, protegiendo bajo amparos a delincuentes de cuello blanco para evitar que paguen millonarios impuestos al SAT, como es el caso de Salinas Pliego y otros personajes de nuestra vida política y empresarial. Ver para creer.


Atentamente,
Ing. Ind. Jesús Espinoza García

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