DESDE LAS ALTURAS
Por: Arturo Albíter Martínez
FALTAN 27 DÍAS PARA LA ELECCIÓN
- Carmen Carreño en la CNC, una de las peores.
- Malos tratos, sin candidatos en la elección que representen al sector y con un mínimo de líderes municipales.
- Estructuras han abandonado no sólo a la organización, se van del partido debido a la soberbia de Carmen Carreño y su familia.
- El detalle político del día: Isaac Montoya candidato a la alcaldía de Naucalpan se siente tan seguro y soberbio que deja de promocionarse en la entidad.
- Ana Lilia Herrera se arma de valor y aunque ha provocado la molestia de muchos priistas intenta apoyar las campañas.
La semana pasada comentamos que las cosas en la Liga de Comunidades Agrarias y Sindicatos Campesinos o CNC como generalmente se le conoce al sector agrario del PRI, iban de mal en peor, Carmen Carreño opera la organización como un bien familiar, sin profesionalismo, carente de capacidad y lo peor del caso con violencia laboral.
La época dorada de la organización campesina quedó en el pasado, los últimos líderes que han encabezado a la organización han dejado de lado el interés de los trabajadores del campo y se han centrado en sacar el mayor provecho personal posible.
De igual forma hemos repetido que esa pérdida de valor, en una organización que fue la más importante en la entidad, se debe entre otras cosas al trabajo que han hecho desde el PRI para debilitar al PRI.
Los sectores y organizaciones que en otro momento le daban vida a la estructura priista ahora sólo son entes que subsisten. Con los dos últimos ex gobernadores y mal llamados primeros priistas, por cierto, ambos señalados como traidores, Eruviel Ávila, pero sobre todo Alfredo del Mazo se dieron a la tarea de debilitar al partido que todo les dio.
El ejemplo más claro es lo que pasa en la CNC. En otros tiempos elegir a quien debía ser el presidente de la organización campesina era todo un proceso. Muchos querían el cargo y es que la organización tenía fortaleza para exigir programas de gobierno y al mismo tiempo las recomendaciones que salían en tiempos electorales eran aceptadas casi en su totalidad.
Para la mayoría era claro que imponer a Carmen Carreño era un error porque tenía muy poco que ofrecer a la organización que había quedado prácticamente desmantelada luego de lo que hizo su predecesor.
Eric Sevilla ayudó a su jefe a desmantelar el PRI y ahora Ana Lilia Herrera está más preocupada por imponer y obedecer en todo momento a Cristina Ruíz, así que poco le interesan las organizaciones.
Así, la actual presidente de la CNC se da vuelo. El poquísimo recurso económico que le llega se lo reparten entre muy pocos, especialmente su familia. La renta de un llamado mercadito también se lo quedan. Para aumentarle el sueldo a uno de sus consentidos, le tiene que bajar el apoyo a otros dos o tres.
No importa el género, porque la violencia laboral con los pocos empleados que subsisten es diaria, especialmente de los familiares.
La aportación que hace al tema agropecuario en la entidad es nula y las recomendaciones electorales no fueron tomadas en cuenta, excepto su espacio y el de su secretaria, en una planilla como regidora, tampoco importa si en su vida ha tenido experiencia política.
Se supone que debe tener 125 comités municipales, en este momento que debían operar al máximo tiene cerca de 80 constituidos, mucho menos que trabajan y otros tantos han dejado, no a la CNC, han abandonado las filas del PRI y buscan espacios en otros institutos políticos.
Así enfrenta el PRI una elección vital para el futuro del estado y del país.
EL DETALLE POLÍTICO DEL DÍA: ISAAC MONTOYA PASÓ DE SER UN SEGURO PERDEDOR A UN SOBERBIO CANDIDATO QUE SE SIENTE GANADOR
Isaac Montoya era virtual candidato de Naucalpan desde hace varios meses. Con apoyo de diversas instancias se paseaba por el municipio, anunciaba sus brigadas de salud y hasta el apoyo para afiliar a quien lo solicitara a los diferentes programas sociales tanto los federales como los estatales, luego de que ganaron los de la actual administración.
A pesar de ello, todos lo colocaban como seguro perdedor. No tenía oportunidad de ganar en un municipio con el control panista en el Ayuntamiento y control en la cámara de diputados.
A pesar del pésimo trabajo de Angélica Moya, parecía una misión imposible para Isaac Montoya ganar uno de los considerados municipios prioritarios.
Pero entonces llegó Cristina Ruíz y en pocos días se encargó de descomponer todo el escenario político para el PRI y sus aliados.
Saca a David Parra de la jugada política con una vil traición de parte de Elías Rescala y con ello le complica el escenario a todos. En el PAN fue Enrique Vargas el que mete la mano y divide al partido en la demarcación.
El resultado se alcanza a ver. Isaac Montoya de la noche a la mañana se convierte en un candidato competitivo, se siente ganador y entonces sale su verdadera imagen. Soberbio.
ANA LILIA HERRERA SE ARMA DE VALOR Y A PESAR DE LA INCONFORMIDAD DE MUCHOS PRIISTAS EN SU CONTRA SALE PARA APOYAR LAS CAMPAÑAS.
Si una persona en el PRI ha perdido gran parte de su capital político debido a las imposiciones que se presentaron en la selección de candidatos, sin duda es Ana Lilia Herrera.
Ha dejado en claro la debilidad que tiene al interior del PRI, poco a nada pudo hacer por los aliados que la han acompañado durante gran parte de su vida política. Los abandonó y causó el enojo de otros más que a pesar del trabajo que habían hecho tampoco fueron tomados en cuenta.
A pesar de ser señalada como una de las principales orquestadoras de la tan criticada selección de candidato, se armó de valor y sale para “fortalecer” las campañas de los aspirantes priistas.
Son eventos controlados, deben cuidar el mínimo detalle porque sería lamentable que alguien le grite por traicionarlos.
