Es una de las películas de terror más malsanas y originales de los últimos años, y acaba de aterrizar en Netflix
Un ambiente oscuro, asfixiante y sórdido, entremezclado con un punto de partida muy sencillo e identificable y una estructura narrativa que parte la historia por la mitad de un hachazo. Son algunas de las características de esta película producida por 20th Century Studios, antigua Fox y por tanto, propiedad de Disney, y que aquí llegó hace un par de años en exclusiva y directamente a su plataforma, sin pasar por cines pese al excelente rendimiento que tuvo en Estados Unidos. Ahora, tenemos ‘Barbarian‘ en Netflix.
La historia arranca con un punto de partida casi cotidiano: una joven que viaja a Detroit para una entrevista de trabajo alquila una casa para pasar la noche. Pero cuando llega, ya a altas horas de la noche, resulta que la casa está en un barrio prácticamente abandonado y doblemente reservada: un hombre extraño se está quedando allí. Los dos parecen tener razón y tener derecho legal a estar en la casa así que, pese a ser completos desconocidos, ella decide pasar la noche en vez de irse a un hotel. Es solo el punto de partida para una pesadilla que no discurrirá por los derroteros esperados.
Sobre todo porque la historia pronto dará un giro en el que conoceremos a un nuevo personaje con una historia también vinculada a la casa. El resultado no es exactamente una historia de lugares encantados, no exactamente una fábula de horrores urbanos, aunque tiene algo de todo eso. El responsable de esta macedonia de estilos es Zach Gregger, director y guionista del film, que aunque se curtió profesionalmente en el ámbito de la comedia, debutó como director con ‘Barbarian’ y, debido al éxito, seguirá conduciendo sus pasos por el género.
‘Barbarian’ se sostiene, pese a momentos de tonteo con los tópicos, gracias al excelente trabajo del reparto: Georgina Campbell y Bill Skarsgård (conocido por interpretar a Pennywise en las dos entregas de ‘It’, y próximo Nosferatu en la adaptación de Robert Eggers que veremos a finales de año) se encargan del primer tramo y Justin Long (otro habitual de entornos de comedia pero que funciona a la perfección en esta deriva hacia el terror) protagoniza la segunda mitad. Cuanto menos sepas, mejor: enfréntante a ‘Barbarian’, una pesadilla encerrada entre cuatro paredes que entresaca todo lo extraño de una situación incómodamente familiar.
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