Opinión

Las circunstancias … mandan

La marca de los partidos y las elecciones

Por: Boghar González y González

En anteriores columnas habíamos referido que en los últimos meses se han realizado encuestas en domicilio cara a cara, en municipios del Valle de Toluca, norte del Edomex y centro del estado de Querétaro, es sorprendente los positivos y negativos que las marcas por partidos tienen de forma individual y cómo se comportan al preguntar por alianzas o coaliciones.

Presidentes municipales, diputados locales y federales que son aprobados y bien calificados por obras públicas, servicios y gestiones de forma personal, se ven severamente disminuidos cuando se ven acompañados de la marca del partido que tradicionalmente los ha postulado y se complica más cuando se plantea la posibilidad de continuidad por reelección.

En el caso del PRI, encontramos un rechazo a la marca a partir de un 36% hasta un 47%, dependiendo del seccional y del municipio, para el PAN ronda desde un 18% hasta un 30% y para el caso de MORENA va de un 12% hasta un 24%, esto se puede perfectamente diagnosticar en función del género, rango de edad, nivel socioeconómico y de estudios.

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Aunado a lo anterior se ve un ánimo en el elector de votar las 5 boletas por una sola opción, en una media del 55%, hasta estos datos se puede concluir que será una elección, la del 2024, de marcas y proyectos, por encima de personas, carisma, incluso recursos económicos, no se descartan candidatos que sean una revelación o que las campañas negras y la participación de poderes fácticos alteren la normalidad democrática.

Y dos ingredientes más para poner aún más interesantes los escenarios es que dentro de los aspirantes de MORENA,  ninguno domina, todos son de media tabla hacia abajo, porque son jóvenes políticos, “chapulines” de otras opciones, no tienen trabajo social y territorial o asumen que las selfies equivale a trabajo político y las aspirantes mujeres aún son muy pocas.

Como ha sido tradición de esta columna, se recomienda a los nuevos actores políticos que hagan trabajo social, enarbolen causas que sientan sectores amplios de las comunidades que aspiran a representar, que las redes sociales implica darles mantenimiento, pero que ahí no se resuelven problemas y se hace política porque son vidas ficticias.

Los teléfonos celulares han cambiado los estilos de vida, la manera de informarse y participar en comunidad, ahora todos somos reporteros y opinantes expertos apasionados de todos los temas, no sabemos discernir entre información, publicidad, propaganda y noticias falsas pero la pantalla nos consume horas de la vida y muchas ocasiones con eso tomamos decisiones que impactan el presente y futuro de forma individual y social.

La decisión estratégica en el 2024, será votar por la persona o la marca, de manera uniforme o diferenciando el voto, estamos a tiempo, para ese momento echar las culpas al pasado habrá caducado su efecto, más nos vale tomar buenas decisiones.

boghar@hotmail.com

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