Opinión

ANÁLISIS 

Tomás Flores Rosales 

“Audiencias públicas “, remembranzas del pasado mexiquense. 

Rediseñarlas a tiempo, la mejor táctica y estrategia del nuevo gobierno .

“Buró de asesores”, urgencia Delfinista . 

Higinio , aquellos momentos de auténtica lucha popular . 

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Terminará relevándola , primero , el Secretario General de Gobierno, luego , los titulares de las 16 carteras principales de su gabinete, para finalmente suspenderlas o desaparecerlas .

   Se trata del modelo de “Audiencias públicas «anunciadas por la Gobernadora, Delfina Gómez Álvarez, que iniciarán dentro de 6 días, tras haberlas puesto sobre el atril el 14 de septiembre pasado durante su discurso de unción en la cámara de diputados local.

    Se desconoce si la recién ungida titular del Ejecutivo estatal suele usar , contratar o pedir apoyo de “asesores” en sus labores de alto rango como lo ha sido la Secretaría de Educación (SEP) y hoy la Gubernatura del Estado de México , de no ser así , debería de hacerlo o bien idear un buró exclusivo de reales expertos en las distintas materias y disciplinas , no de los operadores que únicamente cobran cada quincena , para que pueda tomar decisiones acertadas con mayores posibilidades de “tiros de precisión”, como se presentan ante sus potenciales clientes las casas consultoras de alto rango, de las que tiene a su disposición , en estos momentos , su compañera de partido , Claudia Sheinbaum Pardo, lo cual le ha resultado táctica productiva , obviamente porque la ex jefa de Gobierno de la Ciudad de México sí escucha a las y los estrategas a sueldo y, eso , es excelente para no cometer errores y desaciertos de principiante e irse para el momento cada vez que se requiera de decisiones de linaje intelectual. 

    Y es que si la idea de emprender una política de “audiencias públicas” en medio del oficio de gobernar partió de la misma Delfina Gómez Álvarez debió de tomar en cuenta aristas casi infinitas :

   1.- No es la primera vez que se lleva a la práctica, desde la oficina central de Palacio de Gobierno estatal, la acción de escuchar y responder al mismo tiempo las demandas sociales . 

   2.- Durante el Gobierno mexiquense de Ignacio Pichardo Pagaza se implantó ese esquema de atender a la gente , no es ninguna novedad que sea el “Salón del Pueblo” el lugar para recibir a los demandantes de la cosa pública .

    Ya se hizo así y no funcionó .

    Y de ello quizá el único que podría acusar remembranza, de la mayoría de los colaboradores actuales de Delfina Gómez Álvarez, es el hoy “jefe” del gabinete, Higinio Martínez Miranda, senador con licencia , quien posiblemente enviará a su mente a navegar en aquellos sus tiempos de luchador social cuando llegaba a Toluca con algún grupo de mexiquenses marginados de regiones de la zona oriente para solicitar audiencia con las máximas autoridades y no eran atendidos pero sí agendados para los “días de audiencia pública” insaturados por el gobernador en turno . 

    La verdad , Higinio , sus seguidores, sus compañeros y compañeras de lucha fueron víctimas del autoritarismo, prepotencia y demagogia pura de los todopoderosos gobiernos priistas que tenían la magia de diseñar “audiencias públicas” con sesgos de “reuniones privadas”, falsas y mentirosas , pues los funcionarios de la famosísima dirección general de gobernación eran los encargados de armar “audiencias públicas” a modo ; es decir , simuladas y mentirosas , “cuchareadas” pues , como hoy se dice de los resultados de las dudosas encuestas de tipo electoral, no todas las consejas populares nacieron con Andrés Manuel López Obrador , como se cree , más bien el tabasqueño las ha capitalizado a su favor muy bien , en la época de Higinio y otros luchadores hoy en el anonimato en tierras mexiquenses un reducido grupo bien identificado de mujeres y hombres periodistas de Toluca le seguían y lo arropaban jugándose siempre la “libertad de expresión” y la “chamba”. Y él lo sabe y seguramente no lo ha olvidado . 

   Riesgoso entonces que haya sido Delfina Gómez Álvarez, en un momento de inspiración “populista”, la que haya urdido las consultas de marras sin acudir a los expertos para documentar los beneficios y perjuicios de una acción “desgastante” de administración pública, pues además de que dicha práctica no abonará al talante político de la nueva mandataria , sí construye el camino para que la “buena fe” depositada en darle atención directa al núcleo demandante de derechos se desvíe y adelgace a la gobernadora en su perfil de gobernante del “pueblo y para el pueblo” , como le gusta repetirlo cada vez que tiene la oportunidad.

   Y no es porque sus adversarios y adversarias permanezcan en vela para asegurarse de que le vaya mal a la nueva Gobernadora en estos momentos en que todas las condiciones políticas y administrativas en tierras mexiquenses favorecen a la ex alcaldesa de Texcoco .

   Más bien el “juego que todos juegan” a estas alturas del nuevo sexenio en el entorno de los poderes fácticos mexiquenses, es el que intenta que no se desborde el escenario de la normalidad como consecuencia del síndrome que aflora cada vez que se trastoca un régimen anquilosado por muchos años en el mismo lugar como lo es hoy el mexiquense. 

  De tal suerte que hay tiempo aún para re diseñar o “ajustar” las “audiencias públicas” que trae en mente la nueva Gobernadora si así fuera el caso .

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