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Apolo 8, el lanzamiento espacial de 1968 que también se realizó en medio de una pandemia

Las vísperas del lanzamiento del Apolo 8 en 1968 no lucían tan diferentes a las del próximo lanzamiento del primer vuelo operativo de la NASA y SpaceX, con el cual arranca oficialmente una nueva era de viajes espaciales, según dijo Jim Bridenstine, Administrador de la Agencia Espacial.

Hace 52 años,  EU se veía afectado por “la llamada influenza de Hong Kong”. En esas mismas páginas se encuentran las notas sobre el próximo lanzamiento del programa Apolo. Pero esta no era cualquier misión, se trataba de la primera vez que el humano se dirigiría a la órbita de la Luna; entonces no se habían descubierto moléculas de H2O como lo anunció este lunes la NASA.

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Primeras planas del 17 y 18 de diciembre de 1968. Imagen: Hemeroteca El Univesrsal

Entonces la misión buscaba conocer los efectos de la falta de gravedad en el cuerpo; hoy sabemos que las estancias espaciales causan pérdida de masa muscular, deterioro de huesos y afectaciones en el volumen de la sangre.

Entre los hitos que dejó la misión se encuentra la primera fotografía del planeta Tierra visto desde el espacio y una histórica transmisión en televisión el día de Navidad, en la que los astronautas leyeron un fragmento del libro del Génesis.

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Estas son las historias que publicó EL UNIVERSAL sobre el lanzamiento del Apolo 8 en 1968.

El sábado, a la Luna

17 de diciembre de 1968

CABO KENNEDY. 16 de diciembre.– Los tres tripulantes de la cosmonave Apolo-8 fueron declarados hoy en perfectas condiciones para emprender el sábado próximo el audaz vuelo hacia la Luna.

El jefe de los servicios médicos para los astronautas, Dr. Charles Berry declaró: “Todo está en magnífico estado. No hemos visto nada que pueda causarnos preocupación”.

Los astronautas Frank Borman, que tiene 40 años de edad; James Lovell, también de 40, y William Anders, de 35, dedicaron buena parte de la jornada a someterse a minuciosos exámenes médicos. El sábado, poco antes de instalarse en su cosmonave lunar, serán objeto de otro examen más limitado.

Los tres tripulantes de la Apolo-7 sufrieron resfriados a poco de emprender su prolongado vuelo, pero Berry dijo hoy: “Parece que esta vez hemos evitado las enfermedades”.

La del sábado será la tercera excursión espacial de Lovell, la segunda de Broman y la primera de Anders.

La cuenta regresiva preliminar para el comienzo de la aventura orbital lunar de seis días comenzó anoche, conforme a lo programado, debiendo concluir el sábado a las 7.51 (12.51 GMT), cuando tendrá lugar el disparo.

Además de confirmar el perfecto estado físico de los astronautas, los exámenes médicos de la fecha tuvieron por objeto reunir información para compararla con la que se obtenga tras el vuelo, verificando así hasta que punto afecta al hombre un vuelo total de unos 800,000 kilómetros, especialmente en veteranos como Borman y Lovell.

“Se trata de los hombres sobre quienes probablemente tengamos la mayor información médica, en vuelo, de la historia”, dijo Berry.

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Borman, Anders y Lovell, en 1968. Foto: NASA

Borman y Lovell realizaron el mayor de los vuelos espaciales efectuados hasta ahora, un viaje de 14 días a bordo de la cosmonave Géminis-7 pero Lovell también permaneció cuatro días en la Géminis-12.

“Tenemos aquí una rara oportunidad de comparar el estado de dos individuos en una cabina tan limitada como las de la serie Géminis con la muy amplia de la serie Apolo, agregó el científico.

Berry precisó que comparando los resultados de los vuelos Géminis con el que hará la Apolo, los médicos estarán en condiciones de determinar por primera vez hasta que punto afecta la ingravidez al ser humano, sin que los hallazgos sean nublados por los posibles efectos de la incomodidad de la cápsula Géminis sobre los pilotos.

“Tal vez podamos superar ese factor y apreciar realmente las consecuencias de la ingravidez”, reiteró Berry, explicando que semejantes datos permitirán conocer especialmente los efectos de la falta de gravedad sobre los sistemas óseo y sanguíneo.

El programa prevé dos circunvalaciones de la tierra durante la mañana del sábado antes de reencender la etapa superior de su poderoso cohete Saturno-5 para dar a su cosmonave lunar la velocidad necesaria rumbo al satélite natural de la Tierra.

La Apolo-8 entrará en órbita de la Luna el 24 de diciembre, circunvolará 10 veces el satélite y luego volverá a la Tierra en las primeras horas del día de Navidad, acuatizando ese mismo amanecer en el Océano Pacífico, unas 750 millas al sudoeste de las islas Hawai.

Durante el vuelo, los astronautas efectuarán seis transmisiones directas de televisión a la Tierra, dos de ellas en órbita de la Luna.

Los vuelos “Apolo” un gran éxito de EE.UU

Por Charles R. Schroth, escritor de asuntos científicos de SIE

WASHINGTON, 16 de diciembre. – El programa norteamericano Apolo de exploración espacial adquirió impulso y madurez en 1968.

Para fines de año la nación estaba lista a enviar a los primeros humanos a circunvalar la Luna a corta distancia de la misma.

La audaz expedición de 111 kilómetros de la superficie lunar, se intentaría gracias a las proezas de 1968 que sitúan a los Estados Unidos al alcance del aterrizaje mismo en la Luna el año entrante, que fue la meta que señaló el Presidente Kennedy hace casi 8 años.

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Parche de la misión Apolo 8. Imagen: NASA

La monumental empresa Apolo se caracterizó por avances significativos en cuanto a satélites científicos. El acontecimiento más notable fue el lanzamiento del Observatorio Astronómico Orbital (OAO-2), el 7 de diciembre, para hacer cartografía de las estrellas, por primera vez desde el espacio.

EE.UU a punto de iniciar una nueva misión

18 de diciembre de 1968

Las viandas que los astronautas comerán la noche de Navidad -cubos de pavo deshidratados envasados al vacío y torta de frutas preparada de la misma forma- se encuentran ya a bordo de la espacionave. Los propios pilotos de la nave espacial están preparando su espíritu para el largo viaje lunar. “Hacer esto en Navidad -dijo el comandante Broma- es precisamente otra de las cargas de esta misión. Trataré de cerrar los ojos a todo lo que no sea nuestra misión. Lo único que deseo hacer ahora es que el vuelo Apolo-8 resulte perfecto”.

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Los astronautas del Apolo 8 durante un entrenamiento. Foto: NASA

Aniversario

CABO KENNEDY, 18 de diciembre.– Estados Unidos celebró hoy el décimo aniversario de su disparo del primer sateloide capaz de transmitir grabaciones magnetofónicas a órbita terrestre.

Hace 10 años, la fuerza aérea disparó un proyectil “Atlas”, que ubicó en órbita un rudimentario satélite de comunicaciones que más tarde transmitió un mensaje de Navidad grabado previamente por el entonces presidente Eisenhower.

Todo está ya en perfecto orden

20 de diciembre de 1968

Los astronautas redujeron en parte su ritmo de tareas y van a descansar esta tarde y mañana. Lovell va a visitar a su esposa Marylin y a sus cuatro hijos.

Mientras tanto, en la plataforma de lanzamiento se trabaja rápidamente y sin descanso para recuperar el tiempo perdido anoche a fin de que se pueda hacer el lanzamiento en el más óptimo de los momentos, a las 7.51 del sábado.

Las maniobras de preparación fueron demoradas esta madrugada por inconvenientes en la carga de oxígeno líquido e hidrógeno también líquido en la cápsula lunar para alimentar los tres generadores eléctricos.

Los funcionarios informaron que esperaban recuperar o cubrirlo con la interrupción natural prevista en la cuenta para una demora de esta índole.

Los preparativos para el lanzamiento, excepto ese inconveniente, se han desarrollado sin dificultades e inclusive los meteorólogos ratificaron que alguna nubosidad impedirá ver por mucho tiempo al poderosos cohete Saturno-5 cuando se eleve hacia el cielo llevando a la cápsula en su proa.

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El cohete Saturno V. Foto: NASA

Mañana por la tarde la gigantesca torre que encierra al cohete hasta el momento del lanzamiento será llevado hasta la rampa desde la cual el Saturno despegará iniciando la más ambiciosa aventura espacial jamás intentada por el hombre hasta ahora, como es la de volar en torno a la Luna y regresar a la Tierra.

Se espera que la Apolo 8 efectúe 10 vueltas alrededor de la Luna hacia la Nochebuena y en la mañana del día de Navidad inicie el viaje a la Tierra. Durante el vuelo de ida, se ha previsto que los astronautas efectúen dos transmisiones de televisión “en vivo” a la Tierra, otras dos cuando estén volando en torno a la Luna y dos más en el viaje de regreso.

Los tres hombres a bordo, al término de un viaje de ida de 352.000 kilómetros y de más de 66 horas, darán por vez primera la vuelta a la Luna.

Cuatro correcciones de orientación serán posibles durante el enlace interplanetario de “Apolo 8”. Esas correcciones dependerán del grado de inexactitud eventual de la trayectoria.

El martes 24 de diciembre a las 14h21 será la circunvalación de la órbita a una altura de unos 111 Kms. para efectuar diez revoluciones en torno a la Luna durante las cuales los cosmonautas se dedicarán a la observación visual del astro y a tomar vistas fotográficas en blanco y negro en colores y en relieve de, por lo menos, una de las cinco zonas escogidas para el desembarco de los primeros visitantes norteamericanos del satélite de la Tierra.

El regreso a la Tierra durará unas 57 horas. Si fuese necesario se efectuarán tres maniobras de corrección de la trayectoria.

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Los astronautas Borman, Lovell y Anders. Foto: NASA vía AP

Todo listo para la penetración humana más grande en el espacio

21 de diciembre de 1968

CABO KENNEDY.– Los técnicos eliminaron hoy el desperfecto en el sistema de oxígeno líquido en la cosmonave Apolo-8 y sólo las condiciones desfavorables del tiempo amenazaban la iniciación del primer vuelo tripulado a la Luna.

La cuenta regresiva para emprender mañana la histórica expedición continuaba sin tropiezos y un vocero oficial declaró: “La voz de orden para la misión Apolo-8 es que volamos mañana”.

William Schneider, el director de la misión, que conducirá a tres astronautas hacia la mayor penetración humana en el espacio extraterrestre, pues hasta ahora la máxima altura alcanzada en estos vuelos ha sido de 1,370 kilómetros, se mostró optimista sobre las posibilidades de que el lanzamiento tenga lugar a la hora prevista.

Los demás aspectos de los preparativos para conducir hacia la Luna se desarrollan satisfactoriamente, pero todo dependerá de que sean resueltos dos obstáculos de distintas características, uno técnico y otro natural.

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Foto: NASA

El tropiezo técnico para la empresa, que demanda una inversión de 310 millones de dólares, surgió cuando los científicos hallaron una pequeña cantidad de nitrógeno en los dos tanques de oxígeno líquido. Este último elemento se emplea para cargar las células energéticas de la cosmonave, que son las que deben proporcionar la electricidad necesaria a bordo.

El director de lanzamientos de Cabo Kennedy, Rocco Petrone, señaló a su vez que las condiciones del tiempo no parecen muy favorables, pues se prevén nubes bajas y nieblas sobre la plataforma 39 en las primeras horas de la mañana del sábado.

Los astronautas gozaron hoy de un día de descanso en su semiaislamiento y Borman, que es el comandante de la tripulación, señaló: “estamos ya tan preparados como cabe esperarlo”.

Asombrosa perfección. Avanza velozmente hacia la Luna la “Apolo 8”

22 de diciembre de 1968

El despegue

La cosmonave “Apolo 8” se deshizo hoy de todas las barreras terrestres en la mayor aventura de la historia y condujo a sus tripulantes al espacio interplanetario en el primer vuelo humano hacia la Luna.

El monstruoso cohete “Saturno 5” se levantó sobre la plataforma de lanzamiento número 39 de Cabo Kennedy envuelto en un mar de llamas rojas a las 7.51 a.m. (12.51 GMT) y con una asombrosa demostración de poderío colocó a la cosmonave en órbita terrestre.

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Despegue de la misión Apolo 8. Foto: NASA

Lovell, sorprendido

“El Sol aparece brillantísimo, así como la Tierra”, comunicaron al centro espacial los tripulantes cuando se encontraban a 80,000 kilómetros de distancia.

“Me encuentro mirando por la ventana trasera y veo que la Tierra ahora es más pequeña que su circunferencia metálica”, comentaba asombrado Lovell.

Órbita terrestre

“¡Está ya en viaje! ¡Ahora sí que están en pleno viaje!”, comunicó Chris Kraft, el encargado de vuelos de la NASA, después de que los astronautas encendieran su motor para sacar a la “Apolo” de su órbita terrestre a lanzarla hacia la Luna.

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Tras separar la cosmonave de la ya inútil tercera etapa del cohete, llegó la tranquila voz de Lovell, quien señaló:

“Ahora puedo ver toda la Tierra por nuestra ventanilla central. Veo a Florida, Cuba, América Central, toda la parte septentrional de América del Sur. En realidad alcanzó a distinguir todo el Continente hasta la Argentina… y Chile.

“Tenemos una magnífica vista de Florida en estos momentos. Y al mismo tiempo puedo ver el África. Y también distingo Gibraltar”.

Calma y frialdad

Las voces de los astronautas se percibían en comunicaciones lacónicas, calmadas y frías, en acentuado contraste con las maravillas que describían y significaban los acontecimientos del vuelo.

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Con la misión Apolo 8 se logró fotografiar por primera vez la Tierra desde el espacio. Foto: NASA

Las hazañas

En realidad la extraordinaria empresa sólo puede describirse con superlativos. Es la primera vez que se emplea un cohete “Saturno-”, alto como un edificio de 36 pisos, en un vuelo tripulado, y la carga útil de 128.5 toneladas es la más pesada que haya llegado al espacio extraterrestre.

La operación, además, da a Estados Unidos la ventaja más amplia que jamás haya logrado sobre la Unión Soviética desde el comienzo de la era espacial.

A dormir

La primera píldora para dormir que se toma en el espacio será para Frank Borman, después de que directores del programa espacial le dieron esta noche su autorización cuando todavía faltaban dos horas para el periodo normal de sueño a bordo de la “Apolo 8”.

Provoca conmoción mundial el fantástico viaje a la Luna

El lanzamiento del cohete fue visto por televisión por millones de norteamericanos y también por millones de europeos y asiáticos a través de comunicaciones vía satélite.

Tanto el lanzamiento en sí, como la posibilidad de verlo en los tres continentes “en vivo”, gracias a la televisión vía satélite, fueron una prueba técnica de que la Humanidad vive ya en la era espacial.

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Foto de la Luna realizada durante la misión Apolo 8. Foto: NASA

El periódico soviético “Sovetskaya Kulture” no mencionó específicamente el vuelo de la “Apolo 8”, pero se refirió en términos generales al programa espacial norteamericano indicando que el envío de hombres a la Luna sin una seguridad de que podrán regresar a la Tierra significa que detrás del esfuerzo de Estados Unidos se halla “la sed de sensaciones ruidosas” capitalista.

Afirma que el descenso será en mayo o junio

El teniente general Samuel Phillips, director del Programa “Apolo” planteó hoy la posibilidad de que Estados Unidos envíe sus primeros astronautas a descender en la Luna en mayo o junio del año próximo.

Phillips dijo, sin embargo, en una conferencia de prensa que la posibilidad de que ello ocurra, acelerando el programa para el primer alunizaje humano, es todavía remota.

El alto oficial observó que es posible instalar el “Aparato de Descenso Lunar” (ADL) en la “Apolo 10”, en lugar de hacerlo en la “Apolo 11”, si se resuelve acelerar el programa.

Otra posibilidad -agregó- sería dejar de lado todo el vuelo de la “Apolo 10” y pasar directamente a preparar la misión de la “Apolo 11”.

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La histórica fotografía de la Tierra que marcó la misión Apolo 8. Foto: NASA

Mensaje de LBJ

WASHINGTON.– El presidente Johnson dirigió hoy desde su cama en el hospital naval Bethsda un mensaje de felicitaciones a los tres cosmonautas de la “Apolo 8” que viajan ahora rumbo a la Luna.

Johnson se está recuperando aquí de una gripe.

“Los sueños del pasado se acercan cada vez más a los milagros del presente”, declaró.

fjb
 

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