Crisis por Covid-19 obligó a las autoridades a ajustarse el cinturón: RMB
Ricardo Moreno Bastida, secretario del ayuntamiento de Toluca, advierte que si persiste el ritmo actual de contagios, la próxima semana no habrá más camas para recibir a los enfermos
Por: Carolina Sosa
Toluca pasó en cinco días de 773 casos positivos de Covid-19 el 1 de junio
a 994 el sábado 5 de junio.
Los más renuentes a seguir las recomendaciones sanitarias son los
jóvenes.
Los hospitales en Toluca destinados para la atención de pacientes con
Covid-19 se encuentran al 80% de ocupación, de seguir así el ritmo de
contagios, la próxima semana no habrá camas para recibir a los enfermos,
advirtió el secretario del ayuntamiento, Ricardo Moreno Bastida.
En Toluca pasó en cinco días de 773 casos positivos de Covid-19 el 1 de
junio a 994 el sábado 5 de junio, siendo la población joven la que menos
toma en cuenta las recomendaciones, pues los contagios y los fallecidos
están alrededor de los 40 años de edad y son en su mayoría hombres.
En entrevista dijo que en los últimos días hubo un alza en el número de
fallecimientos por esta enfermedad, datos que fueron corroborados con las
instancias de salud correspondientes y reconoció que lo más grave es la
omisión de la ciudadanía, incluso comercios no esenciales que “a cambio
de unos cuantos pesos, arriesgan la vida y la de terceros”.
“Hemos hecho grandes esfuerzos, diariamente hay operativos conjuntos
entre dependencias estatales y municipales, para aplicar cierres en el
centro y las comunidades del norte, especialmente donde es mayor el
número de enfermos por este virus”, enfatizó.
Explicó que los efectos negativos de no asumir las medidas sanitarias
provocaron un severo impacto económico en el gobierno municipal, tanto
que debieron aplicar un ajuste presupuestal que llegó al despido de una
importante cifra de personal del ayuntamiento.
El secretario del ayuntamiento auguró que de seguir así, el impacto en las
finanzas del municipio será tan grave que no habrá alternativas para
impulsar el desarrollo del sector empresarial, personas en pobreza
alimentaria y económica, incluso desempleados durante la emergencia
sanitaria.
Por lo que insistió en que la ciudadanía debe validar la palabra de sus
gobernantes y comprender que en tanto no respete las recomendaciones,
ignore el confinamiento y continúe saliendo sin justificación, sin el uso del
cubre bocas y sin respetar la sana distancia, las consecuencias en
diversos ámbitos rebasará a las autoridades locales.
Sobre la necesidad de endurecer las sanciones o implementar multas por
omitir las medidas sanitarias, subrayó que habrá alternativas para obligar a
la ciudadanía a considerar las restricciones, aunque descartó multas
económicas.
