Senadores de Morena y corcholatas se cuadran con AMLO
Como en los tiempos más presidencialistas del PRI, la mayoría en el Senado acudió anoche a la residencia del Ejecutivo en busca de luz para salir del atolladero en que se metió luego de que la oposición tomó la tribuna en la sede de la Cámara alta en demanda de aprobar un nuevo consejero del Inai para sacar de la parálisis a ese organismo de transparencia. Nos cuentan que no fue iniciativa de los senadores acudir a Palacio Nacional, sino que fueron citados, ante la impaciencia del mandatario al ver que se atoraba el proceso para que le aprobaran la cascada de leyes que tanto le interesan en el último tramo de su sexenio. Vaya regreso que tuvo el coordinador de los guindas, Ricardo Monreal, a una reunión con el presidente Andrés Manuel López Obrador. Citado y a recibir instrucciones. Y, vaya sorpresa, también las otras corcholatas, Claudia Sheinbaum, Marcelo Ebrard y Adán Augusto López, estuvieron en la reunión. Cierre de filas en toda la extensión, en torno al presidente. ¿No me vengan con que la división de poderes es la división de poderes?
Y mientras los senadores de Morena y aliados se retrataban sonrientes en Palacio Nacional, en la sede del Senado en Reforma, los opositores daban sus posicionamientos. La priista Beatriz Paredes puso la frase punzante: “Aquí estamos los senadores de la República. Allá el Poder Ejecutivo y sus súbditos”. Y la senadora por el PAN, Xóchitl Gálvez, se apresuró y madrugó a la mayoría al llegar antes que nadie a la antigua sede de Xicoténcatl y se encadenó al escaño de la presidencia de la Mesa Directiva. Nos cuentan que fue la única que se animó a tratar de boicotear la nueva sesión. Así los ánimos políticos en la República.
¿Viene una nueva etapa en el Instituto Nacional Electoral? Nos cuentan que al menos así lo ven algunos partidos de oposición que perciben más “flexibilidad”, por no decir manga ancha, hacia Morena en las sesiones del Consejo General, al señalar que la presidenta Guadalupe Taddei permitió a los representantes morenistas, Eurípides Flores y Hamlet García, hablar sobre encuestas del Estado de México y la preferencia hacia Delfina Gómez, pese a que no era parte del punto a discusión. Mientras tanto, nos hacen ver, la consejera presidenta pidió a los partidos que se conduzcan con respeto, pero al mismo tiempo insistió que habrá libertad para hablar. ¿Será que le gana su corazoncito tirando más a guinda?
Nos cuentan que el vocero de la Presidencia, Jesús Ramírez Cuevas, quiso quedar bien con el presidente López Obrador y secundó la propuesta que éste hizo en la mañanera, de desaparecer al Inai por “costoso”, y la crítica a los comisionados por sus sueldos de 142 mil pesos al mes, es decir 4 mil 700 pesos diarios, los que comparó con lo que gana un trabajador afiliado al IMSS, con un sueldo de 527 pesos diarios en promedio. “Sus altos funcionarios ganan $4,700 diarios frente a los $526.87 de un trabajador afiliado al IMSS”, tuiteó alarmado don Jesús. Nos hacen ver que se le olvidó decir que el titular del Ejecutivo gana 120 mil 948 pesos mensuales (4 mil 031 pesos diarios), y el propio Ramírez Cuevas, 113 mil 737 pesos cada mes (3 mil 791 diarios). ¿A poco también van a pedir que desaparezca la Presidencia de la República por onerosa?
